No conozco náusea adictiva como la mía.
No conozco la oquedad en mi memoria
ni la tristeza injusta ni la muerte absurda.
Ni una madeja para mi cometa,
ni un huerto para mi jubilación,
o una estrella para mi penumbra
sino este otoño contigo y sin ti.
DE: versos conversos Derechos Reservados © Rogger Alzamora Quijano
me ha encantado este poema, es preciso, n saludo, mery.
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