Y no hubo quien en la oscuridad le alumbrara
con una súplica entrecortada.
Alguien que aplastara con su dedo el silencio hormiga.
Quien lejos o cerca fuese sustento regazo abrazo ternura.
Solo, sentado a la luz de la nada.
Con miles de kilos de culpas. Desposeído.
Como quien no existe a los ojos ni lleva sombra.
Como una pluma que no sabe de viento.
Solo. Sin tacto sin pies y sin pasos.
Sin dedos sin pelos sin llanto.
Rendido y solo.
D
E: versos conversos Derechos reservados Copyright © 2009 Rogger Alzamora Quijano
Increíble como la soledad puedo desparramarse en letras y sus astillas incorporarse en palabras que unidas componen tan bello poema. P E R F E C T O!!!
ResponderEliminarLa estructura del poema es excelente, el uso que le da a las palabras, me transporta a un lugar conocido y vivido.
ResponderEliminarOjalá sólo se trate de un poema perfectamente escrito y estructurado, ya que si no es así: desgarra e inmoviliza.